Puede que en ocasiones sea fácil. La familia y los amigos te ofrecen ayuda. Puedes acudir a buenos profesionales sanitarios, gente de tu agrado y en la que confías, justo cuando lo necesitas. Sabes que su ayuda sirve para darle a tu ser querido el mejor tratamiento y cuidado posibles. Pero no siempre es tan sencillo. Puede que tengas la impresión de que el personal sanitario, la familia o los amigos no están haciendo lo suficiente para ayudarle.
Consejo: Si no estás satisfecho con la atención profesional que recibe o con otras personas implicadas en su cuidado, busca a otras. Pide a amigos o cuidadores más expertos que te recomienden a alguien. También puedes buscar a profesionales sanitarios muy bien valorados por Internet. En el fondo, se trata de garantizar que tú y tu ser querido os sintáis cómodos, los tratamientos sean sencillos y que ambos estéis felices.