La importancia de dormir bien para vivir mejor
Dormir bien es tan esencial para nuestro cuerpo como mantener una alimentación saludable. Te contamos por qué y te damos algunos consejos para conseguir un descanso efectivo.
Seguro que te suena eso de “solo he dormido cinco horas”, “nunca tengo tiempo para dormir la siesta” o “hace días que no descanso bien”. Lo peor es que, en general,le damos poca importancia al hecho de dormir –o descansar–.Sin embargo, la falta de sueño tiene muchos efectos secundarios, e incluso podemos desarrollar problemas a nivel metabólico, inmunológico y psicológico, entre otros.
Ventajas de dormir bien
Según un estudio de la Fundación Nacional del Sueño de Estados Unidos, los adultos menores de 65 años deben dormir entre siete y nueve horas para rendir plenamente en sus actividades diarias.
Además, dormir bien influye también en la prevención de ciertas enfermedades. Por ejemplo, está demostrado que para el mismo universo que el dato anterior (hombres menores de 65 años) dormir un mínimo de seis horas* al día reduce un 29% el riesgo de desarrollar cáncer de .
Entre otros beneficios de descansar suficiente podemos encontrar la prevención de accidentes, especialmente automovilísticos, y el mejoramiento del estado de ánimo.
Cómo conseguir un sueño de calidad
Adoptar pequeños hábitos diarios puede ayudar a que nuestro sueño sea continuo, sin interrupcionesen mitad de la noche que puedan desvelarnos.Te damos cinco consejos breves para que tu descanso sea reparador:
- Evita tomar alcohol o cualquier bebida estimulante unas horas antes de dormir. Intenta no comer nada tres horas antes de ir a la cama, de forma que tu cuerpo ya haya hecho la digestión al acostarte.
- Ya sabemos que vivimos conectados, pero se recomienda no mirar ninguna pantalla luminosa (móvil, tableta, televisión, ordenador…) una hora antes de ir a dormir.
- A veces nos cuesta despertarnos por la mañana y alargamos el momento de levantarnos. Sin embargo, lo mejor para la salud es hacerlo en cuanto suena la alarma. De esta manera, evitamos la sensación de cansancio debido a que nuestro cerebro no habrá empezado un nuevo ciclo de sueño.
- Si vas a realizar deporte, no olvides hacerlo antes de las 19 horas para que tu cuerpo no se active demasiado como para no dejarte dormir por la noche.
- La siesta es buena. Previene cardiopatías, reduce la tensión arterial, aumenta la concentración y te hace recuperar horas de sueño, entre otros beneficios. Eso sí, se recomienda no superar los 30 minutos de siesta y hacerlo entre las 13 y las 17 horas, a poder ser en un espacio cómodo y agradable.
