
Cuando se cuida de alguien, a veces uno puede sentirse abrumado, pero no tienes por qué afrontarlo todo solo. No pasa nada por pedir ayuda. Puedes recurrir a grupos de apoyo, voluntarios e incluso cuidadores profesionales. Pero empieza por preguntar a amigos y familiares; te sorprenderá lo dispuestas que están las personas a ofrecer su apoyo. Sé sincero y específica lo que necesitas para que puedan ayudarte a marcar la diferencia. Tenemos algunas ideas para ayudar a los cuidadores jóvenes a compartir la carga de trabajo.

Limpieza y orden
Un poco de ayuda doméstica es muy útil. Una persona que simplemente haga la colada por ti te quita un peso de encima.

Ayuda para hacer la compra
Pide ayuda para comprar medicinas, alimentos o artículos para el hogar. Siempre hay algo en la lista.

Visitas a tu ser querido
Convence a amigos y familiares para que visiten a tu ser querido y disfruten de juegos, paseos y películas.

Es cuestión de organizarse
Una forma de tenerlo todo bajo control es crear un plan de cuidados con tareas claramente etiquetadas para cada día, de modo que sepas lo que hay que hacer en cada momento. Después, puedes asignar tareas a quienes se hayan ofrecido a ayudarte. Puede que a algunos les guste trabajar juntos, así que crea un plan que funcione para todos. Prueba a utilizar nuestra plantilla de ayuda para empezar.